El helado se derrite ante la crisis económica
El helado se derrite ante la crisis económica. Los españoles están cambiando sus hábitos de compra para hacer frente a la subida de precios en los productos de alimentación y bebidas. Sus prioridades y preferencias se están viendo alteradas por la disminución de su poder adquisitivo debido a la inflación y la subida de tipos de interés, generando una situación de ahogo económico entre los consumidores.
De acuerdo con un estudio reciente de Zinklar, la plataforma SaaS en investigación de mercado, los consumidores españoles dan máxima prioridad al precio de los productos. En el último año, el porcentaje de consumidores que consideran el precio como el aspecto más importante ha pasado de ser el 25% a ser el 49%, duplicando la sensibilidad al precio de los compradores españoles. Por el contrario, la calidad, considerada anteriormente como el aspecto más importante para un 31% de españoles, ahora pasa a serlo sólo para un 19% de éstos (bajando 12 puntos porcentuales).
Los caprichos de los que nos privamos
El aumento de precios ha afectado a la compra de pescado y marisco en un 53% de los compradores, que ahora compran menos cantidad o con menor frecuencia. El estudio destaca también la bajada a nivel global de los helados, los cuales se han visto afectados en un 38% de los casos (casi la mitad de los consumidores han dejado de comprarlos), siendo así los más perjudicados por la reducción de compra.
Adicionalmente, debido al incremento de precios, los consumidores han optado por reducir la cantidad o frecuencia de compra en las categorías de carne (38%), quesos (35%), dulces y desayuno (34%), fruta y verdura (31%), yogures y lácteos (28%) y embutido (27%); mientras que en categorías como chocolates y bombones (37%), comida precocinada (35%), comida preparada (29%), golosinas (27%), vino (24%), snacks salados (23%) y snacks de chocolate (22%) los consumidores optan directamente por dejar de comprar la categoría.
En el caso de los consumidores que el incremento de precios les ha afectado en categorías como pan de molde/tostado (18%), café (17%) y pastas, arroces y legumbres (16%), destaca como una de las principales medidas tomadas el cambio de marca del fabricante a marca del distribuidor.
Las medidas de ahorro más populares entre los españoles
Prácticamente todas las categorías de compra han experimentado algún tipo de impacto, ya sea por la reducción en el volumen de compras o incluso por el abandono, lo que ha llevado a los españoles a cambiar sus hábitos de compra para adaptarse a los precios actuales.
Los consumidores cada vez más eligen marcas blancas y buscan formatos más grandes cuando estos suponen un ahorro en el precio. La mayoría de los compradores (56%) están buscando más ofertas y promociones para ahorrar dinero, mientras que el 45% están comparando más los precios. Además, el 37% de los compradores han dejado de comprar algunos alimentos debido a los altos precios, y este porcentaje aumenta al 63% entre aquellos que se han visto más afectados por estos incrementos.
Parece ser que más de la mitad de los compradores, específicamente el 52%, no está seguro de poder hacer frente a un posible incremento en los precios durante los próximos meses. Además, el 62% de ellos afirma que tendría que buscar soluciones más drásticas si los precios continúan aumentando. Sin embargo, a pesar de esta situación, el 71% de los españoles confía en que las marcas no reducirán la calidad de sus productos.
Los grandes beneficiados de la inflación
Se ha podido notar un incremento favorable en el número de compradores que eligen cada vez más las cadenas alemanas Lidl y Aldi. Según el estudio, estos dos supermercados son los que más puntos suben en el último año (de 39% a 44% en el caso de Lidl y de 12% a 17% en el caso de Aldi), mientras que Mercadona baja 8 puntos porcentuales (de 70% a 62%) aunque sigue liderando la cuota de mercado en España.